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Los gatos tienen fama de ser poco bebedores y, muchas veces, eso es cierto. El motivo es que, en estado salvaje, estaban acostumbrados a obtener gran parte del agua que necesitaban directamente de las presas que cazaban.
Por otro lado, estos felinos tienen una gran capacidad para concentrar la orina. Esto les ayuda en situaciones donde tienen poco acceso al agua y era algo esencial para el antepasado de los gatos domésticos, que vivía en el desierto.
Dicho esto, ten en cuenta que, si lo alimentas sobre todo con comida húmeda, que contiene entre un 70 y un 80% de agua, puede tener cubiertas esta necesidad y por eso tu gato no bebe agua.
Otra respuesta a “por qué mi gato no bebe agua” puede ser que su bebedero esté sucio o muy cerca del arenero o de lugares que no le gustan.
“Mi gato no bebe agua, ¿hay algún problema?”. Es muy posible que sí.
Los gatos son propensos a sufrir enfermedades del tracto urinario que pueden empeorar cuando tienen la orina muy concentrada. Por eso mantenerse hidratado es fundamental para tu felino.
Un gato de unos 4 o 5 kilos necesita entre 200 y 250 mililitros de agua al día (el equivalente a un vaso). Parte la obtendrá a través de su comida, otra la produce su organismo y otra debe beberla.
Si tu gato se alimenta de comida húmeda, necesitará beber menos, pero si se alimenta solo con comida seca, esta solo aporta un 6% de agua y necesitará beber para no tener problemas de salud.
Existen muchos trucos que pueden ayudarte si tu gato no bebe agua. Nuestra recomendación es que vayas probando para conocer sus preferencias:
Como ves, es muy importante que tu gato se mantenga hidratado. Si te encuentras diciendo “mi gato no bebe agua”, no te preocupes, tienes muchas maneras de motivarle. Eso sí, si lo has probado todo y tu felino sigue sin beber, consúltalo con el veterinario.
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