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¿A qué puedes jugar con tu gato? Despertemos sus ganas de jugar ¿A qué puedes jugar con tu gato? Despertemos sus ganas de jugar

Gabriella Tami Doctora en Veterinaria y Máster en Etología
Publicación: 07/03/23
¿A qué puedes jugar con tu gato?

Muchas personas que viven con un gato describen a su compañero de cuatro patas como si fuera perezoso o nada juguetón. La casa está llena de juguetes abandonados que el gato ignora después de haberles dedicado unos segundos de su atención el primer día que los vio. 

Tras intentarlo con diferentes juguetes, muchas personas se rinden al hecho de vivir con un gato que no tiene ganas de jugar. Pero, ¿será eso cierto? 

Analicemos las tipologías de juegos, descubramos el porqué del interés súbito que le genera un insecto que entra por la ventana, por ejemplo, y encontremos la forma adecuada de despertar las ganas de jugar que nuestros gatos llevan dentro.

El juego: un pilar de su bienestar

Encontrar la manera para estimular el juego en el gato no es un cuidado “extra” destinado a los pet parents más comprometidos: los gatos necesitan jugar.  

La oportunidad de jugar y realizar la conducta predatoria se considera uno de los 5 pilares del bienestar de un gato y, por ello, debemos entender el porqué de los juegos y como optimizarlos1.




La necesidad de cazar o jugar a cazar de un gato es tan fuerte que, aunque esté saciado, solo puede prestar atención a los estímulos que sugieren que una presa anda cerca, como un leve crujido o el movimiento rápido de un objeto del tamaño de un ratón2

El hecho de no tener oportunidades de jugar o cazar puede pasar factura tanto al gato como a quien vive con él. Intentos infructuosos de jugar con las personas, otros animales de la familia o con objetos de casa pueden derivar en frustración, aburrimiento, estrés y puede tener impacto sobre su salud y comportamiento3.

Cuando un gato no realiza suficiente actividad física aumenta el riesgo de que coja más peso de lo que debería y empieza un círculo vicioso en el cual moverse y jugar cuesta cada vez más. 

Es primordial que dediquemos suficiente tiempo a nuestros mininos ya que jugar más de 5 minutos, además de ayudarnos a controlar su peso, puede disminuir los problemas de comportamiento4 y puede reducir la tendencia del gato a cazar presas5.


Este aspecto puede ser importante tanto para contribuir a proteger la fauna local como para proteger la salud de nuestro gato. Así que, el juego puede ser la manera para que el gato exprese sus habilidades de cazador, se entretenga mentalmente y se mantenga en buenas condiciones físicas.

Beneficios del juego en gatos

Pero ¿cómo podemos despertar sus ganas de jugar? Para contestar a esta pregunta, hay que ir por partes y descubrir a qué juegan los gatos, qué opciones de juego hay en casa, por qué parece que no quieran jugar y, finalmente, cómo conseguir que participen más en el juego.


¿A qué juegan los gatos y a qué edades?

En términos generales, nuestros gatos jugarán sobre todo a pelearse y a cazar. El juego de la pelea es un tipo de juego social donde necesita un compañero de juego: es la primera forma de juego que desarrollan los gatitos cuando tienen tan solo 2-3 semanas de vida y aún tienen que perfeccionar sus capacidades sensoriales y habilidades motoras. Aunque a partir de la cuarta semana los gatitos empiecen a descubrir el fascino irresistible de algo pequeño que se aleja corriendo, el juego social es prioritario en estos primeros meses.

Más adelante, alrededor de los 4-6 meses, las prioridades se invierten6  y los gatitos empiezan a prestar más atención a todo lo que tenga tamaño de una presa y se mueva como tal7. A partir de este momento, el juego predatorio, sea con una presa o con un objeto, será predominante. En el caso de una presa real el gato hará su captura y, aunque parezca juegue con ella, realmente estará tratando de sacar información sobre su potencial antes de morderla y completar la caza8.

Durante toda su vida, además de jugar a la lucha o a la caza, los gatos pueden jugar al “momento de locura”: un juego solitario hecho de carreras, saltos y escaladas encima de los muebles de la casa, en los que el gato parece dar rienda suelta a sus energías, pero sin interactuar con nada en concreto.


¿Qué opciones de juego hay en casa?

Teniendo en consideración a qué juegan nuestros mininos, las opciones de juego en casa para ellos incluyen:

1. Juguetes para que el gato se entretenga solo
En esta categoría podemos encontrar juguetes de diferente forma y tamaño, juguetes automáticos que se mueven solos y juguetes con aromas vegetales estimulantes, como el catnip, la valeriana o el matatabi9. Están pensados para despertar su interés sin necesidad de que una persona los mueva, aunque esto no quiere decir que no se puedan emplear para una sesión de juego interactivo con una persona. 

 

2. Juego interactivo con una persona
En estas sesiones, la función de la persona es mantener en movimiento un juguete tipo caña de pescar, un plumero o un simple cordel o “dar vida” a ratoncitos, pelotitas, granos de pienso, etc. lanzándolos para que el gato los persiga y atrape.

 

3. Juego social con otros gatos
Este tipo de juego solo ocurre entre gatos que se llevan bien. Cuando gatos que viven juntos no tienen ningún tipo de interacción durante el día excepto durante unos momentos de juego, lo más probable es que no se trate de juego y es importante recordar es que no es un juego si un gato quiere y el otro no.

 

4. Juguetes dispensadores de comida
(comerciales o caseros) y prácticas que instan al gato a localizar y cazar su comida, como esconder croquetas en diferentes lugares de la casa o lanzarlas para que el gato las atrape.


Trata de realizar todas estas actividades en un entorno estimulante
donde el gato tenga la posibilidad de esconderse, saltar, trepar, utilizar la dimensión vertical de la casa, observar el ambiente desde una posición elevada y protegida, afilarse las uñas, y mucho más. Es decir, en un entorno donde tenga la posibilidad de “ser gato”.

Estimular el juego es importante para todos los gatos, pero lo es aún más para los que no tienen nunca acceso al exterior, ya que viven en un ambiente donde es posible que haya pocas “novedades interesantes” y que por exceso de previsibilidad puede resultar estresante10.

También debes tener en cuenta que puede ser que a tu gato no le apetezca jugar. Descubre qué puede ser y aprende más consejos para cuidar de nuestros gatos en nuestra cuenta de Instagram.

Bibliografía consultada:

1. Ellis, S. L., Rodan, I., Carney, H. C., Heath, S., Rochlitz, I., Shearburn, L. D., Sundahl, E., Westropp, J. L. (2013). AAFP and ISFM feline environmental needs guidelines. Journal of feline medicine and surgery, 15(3), 219-230.
2. Hall, S. L., Bradshaw, J. W. (1998). The influence of hunger on object play by adult domestic cats. Applied Animal Behaviour Science, 58(1-2), 143-150.
3. Heath, S. E. (2007). Behaviour problems and welfare. In The welfare of cats (pp. 91-118). Springer, Dordrecht.
4. Strickler, B. L., Shull, E. A. (2014). An owner survey of toys, activities, and behavior problems in indoor cats. Journal of Veterinary Behavior, 9(5), 207-214.
5. Cecchetti, M., Crowley, S. L., Goodwin, C. E., McDonald, R. A. (2021). Provision of high meat content food and object play reduce predation of wild animals by domestic cats Felis catus. Current biology, 31(5), 1107-1111.
6. Bateson, P., Barrett, P. (1978). The development of play in cats. Behaviour, 66(1-2), 106-120.
7. West, M. J. (1977). Exploration and play with objects in domestic kittens. Developmental Psychobiology: The Journal of the International Society for Developmental Psychobiology, 10(1), 53-57.
8. Biben, M. (1979). Predation and predatory play behaviour of domestic cats. Animal Behaviour, 27, 81-94.
9. Bol, S., Caspers, J., Buckingham, L., Anderson-Shelton, G. D., Ridgway, C., Buffington, C. A., ... Bunnik, E. M. (2017). Responsiveness of cats (Felidae) to silver vine (Actinidia polygama), Tatarian honeysuckle (Lonicera tatarica), valerian (Valeriana officinalis) and catnip (Nepeta cataria). BMC veterinary research, 13(1), 1-16.
10. Rochlitz, I. (2005). A review of the housing requirements of domestic cats (Felis silvestris catus) kept in the home. Applied Animal Behaviour Science, 93(1-2), 97-109.

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